viernes, 25 de marzo de 2011

Es mucho más complejo que el mero echo de ser amigas. Es cuestión de fidelidad, de confianza.
Mucho más que el mero echo de quererse. Más aún que escucharse, o abrazarse o llorar juntas.
Es un desinterés mutuo, un afecto sin razón, una afinidad, una conexión.
Es cuestión de confianza, de fidelidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario